Ola
Creo que he malinterpretetado el ahogarse con una ola de Mar.
Siempre he querido sentirme feliz con quien soy, "una pulga que habla", que siente que jamás podría ser más.
Hoy lo dije, me liberé e intenté enamorarme, ¿Cómo podrá llegarte mi amor si no puedo enamorarme a mi?
Hoy platiqué contigo sobre el amor, sobre lo pequeñe que me siento y me dijiste "ERES ENORME" como una ola de mar. Me encantaría creerte y estoy en proceso de hacerlo, porque me estoy seleccionando.
Yo sé que entre tu y yo hay mucho de diferencia, que trato de darte lo mejor de mi y que hay algo en mi que lo detiene, que me aleja, que me lleva poco a poco, como olas de mar, de tu centro.
Me encuentro atrapade y es horrible admitirlo, atrapade en tus ondas enormes y tus corrientes continentales, me da miedo que salga la luna llena y me devores, me destruyas y me convierta en solo un trozo de basura de tripulante.
No te insisto, mejor te invito a que me ames. Soy valioso, soy amor, soy una persona que existe y necesita un capitán que lo guíe por unos días nada más.
Me cansé de tripular a la deriva, buscando una ola para surfear cuando encontré un monstruo marino para conquistar.
Me gusta pensar en nosotros como dos bestias que nos detiene una grande masa de tierra, esa masa es el mundo que vamos a conquistar para encontrar nuestros ojos abiertos de par en par, nuestras mejillas se unen y nuestra ambición es tan grande que cuando devore mi parte temo daño hacer en tu tempestad.
Hay días donde me siento sole, con ganas de decirte que eres el monstruo que necesito a mi lado, trato de sumergirme en el agua para encontrarte, pero me ahogo en el intento. Si tan solo pudiera tocar la punta más larga de tu pie, podría decirte lo mucho que te he esperado; pero ni eso puedo.
Soy débil, soy apenas esa ola que llega a la superficie y te lleva de regalo una concha de mar. Pero no te preocupes, que con mi preparación estoy listo para surcar en tu isla y llevarte a mi fondo abisal porque eres el pez con el que quiero, toda mi vida, estar.
Espera por mi, deseame, que el tiempo es sabio y lo es, aún más, la mar.
Comentarios
Publicar un comentario